¿Dopa qué ... ? dopamina

Acabo de descubrir que mi cerebro rebosa dopamina. ¿Y qué es eso, os preguntareis? pués ni más ni menos que el neurotransmisor del placer.Pero no penseis mal, que no me paso el día disfrutando como una loca. La dopamina es la gran causante de mi forma de ser (y yo echándole la culpa a mis sufridos papás).
Resulta, que cuanta mayor cantidad de dopamina tenemos en nuestro cerebro, más inseguros, miedosos y tímidos seremos (se acabó lo de echar la culpa a la vida por las experiencias). Soy dopaminante, lo asumo.
Ahora, cuando intente entender por que los cabezudos me causan temor pensaré que aquel día mi cuota de dopamina estaba a tope.
Cuando mi quinceañera llegue tarde y no consiga hablar con ella por teléfono, intentaré que no me invada la dopamina (soy de las que enseguida piensan que algo malo le habrá ocurrido).
Cuando en una reunión séa incapaz de decir una palabra y me pregunte que demonios me pasa, ya tendré a quién echar la culpa, pensaré que mi dopamina está queriendo todo el protagonismo.
Pensándolo bién, ser presa fácil de la dopamina no es un chollo, claro que también puedo darle la vuelta a la tortilla y pensar que por eso soy cauta.
Toda la vida luchando por ser más sociable, más echada pa'lante y resulta que llevo un lastre conmigo que parece agusto instalado en mí.
En fín, la vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida ¡ay diós!.
Seguiré informando ... .