jueves, 2 de febrero de 2012

Sindrome de Sthendal

Esta enfermedad psicosomática, causa un elevado ritmo cardíaco, vértigo, confusión e incluso alucinaciones y ocurre cuando un individuo está expuesto a obras de arte que le resultan especialmente bellas o expuestas en grandes cantidades en un mismo lugar.
Se le denomina así por el famoso escritor francés Sthendal (seudónimo de Henri-Marie Beyle).
Dicen que en 1817, visitando Florencia y tratando de no pederse detalle para su diario, pasó todo un día admirando iglesias, museos y galerías de arte. Admirando cúpulas, frescos, estatuas y fachadas pero de pronto, al entrar en la majestuosa iglesia de Santa Croce, se sintió aturdido, con palpitaciones, vertigo y angustia y una sensación de ahogo que le obligó a salir para tomar aire.
El médico que lo revisó le diagnosticó "Sobredosis de belleza" y desde entonces ese síntoma se le conoce como "Síndrome de Sthendal".
En fín, ya veis que todo en exceso es malo, habrá que cuidarse y mantener a raya lo demasiado bonito. Así que ya sabéis chicos y chicas, el espejo solo para ocasiones especiales.
Seguiré informando... .

10 comentarios:

  1. No me extraña que al pobre Sthendal le diera ese sindrome en Florencia...a mi me paso lo mismo en Venecia
    Besos

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    1. ¡¡¡Pero que me cuentas!!!... Menudo susto que le darías a Patricia, lo bueno es que veo que conseguiste recuperarte jajaja.
      Besitos.

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  2. Hola Rosa, el tema del síndrome de Sthendal dá para mucho, personlamente a mi me sucede cada vez que entro en tu blog....
    Gracias guapa, encantado estoy, besos sintomáticos...

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    1. ¡Ayyy mi zalamerin! para bello el tuyo.
      Besos recíprocos.

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  3. ¡¡UY!! ME ESTÁ ENTRANDO UN MAREO ¿PORQUÉÉÉ SERAAAAAA?.
    Un besazo, GUAPA.

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  4. ¿Estas mirándote al espejo? mira que ya avisé al respecto eh.
    Por cierto, dile a La Bombi que se asome, que no se la ve nada de nada.
    Besitos.

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  5. Qué placer, tener una sobredosis de belleza artística y estética.
    Y te digo que, bien pensado, es lógico que exista este síndrome: al fin y al cabo, vivimos en tiempos donde hay sobredosis de mediocridad y bajeza, que bien me malhumoran.
    Entonces, ¿por qué no habría de existir lo contrario?

    Va un beso.

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  6. Claro que si pelado e imagino que en aquellos años tambien habría mediocridad y bajeza porque ya se sabe... "todo lo malo se pega".
    Un besito.

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  7. No sabía esta historia. Yo que me emociono ante todo lo bonito, pintado o natural, deberé tener cuidado, aunque te diré, querida Rosa, que prefiero que me den estos síntomas por ver lo bello, a que me agarren por estrés laboral como me ha pasado :)

    Besazos, reina.

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  8. Liliana, de acuerdo contigo, mejor sucumbir a lo bello que al cansancio.
    Un besito.

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