Allá vá con su short y su mochila rosa.Mira que le dije que no hacía buén día para ese pantalón,que iba a pasar frío,que hacía aire pero ya sentenció haciendo caso omiso "no voy a tener frío".Benditos quince años en los que te falta el frío y te sobran las ganas.
Allá vá con los tuppers y la socorrida tortilla y las croquetas,esas por las que me pase toda la tarde de ayer metida en la cocina y que ella en un pis-pas entre risas y coca cola se comerá en su primera comida de campo con sus compis e intuyo que su recién estrenado "noviazgo".
El día no acompaña demasiado,aunque el sol hace de vez en cuando algún que otro guiño.Posiblemente esas nubes no les hará la puñeta de rociarlos con su inoportuna humedad,aunque seguro que si eso sucede ya van preparados con la famosa capucha del "da lo mismo" o ese otro modelo llamado "me gusta mojarme cuando llueve".
Supongo que la prisa (iba con el tiempo justo de llegar donde había quedado) hizo que se olvidara de mi beso,aunque reconozco que esa amnesia tan inoportuna y reincidente lleva ya tiempo instaurada.¿Será que ya no se lleva? que eso ya no es de mayores (es que las modas pasan tan rápido) aunque al menos el "hasta luego" si salió de esa boquita de piñón.
Me maravilla esa capacidad que tiene para levantarse con 2 horas de antelación y que le falte tiempo,debe ser cosa de la ducha que no baja de 1 hora y la puesta a punto de ese pelo que hay que alisar con sumo mimo,que oye,aunque sea para estar en un prado que te vean mona y arreglada que luego ya sabemos lo cotilla que es la gente.
En fín,prometo no morir en el intento en esta carrera de fondo,la adolescencia no podrá conmigo.
Seguiré informando... .
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